El teatro en República Dominicana : su evolución

Cada día son más las propuestas teatrales que se suman a las salas. Para muchos, el teatro es una de las ramas de las artes escénicas más completas. Su magia e historia es envolvente. Hace un par de décadas atrás, el teatro en República Dominicana era considerado como una forma de expresión y manifestación tanto para la iglesia como para algunos manifestantes políticos.
rep-dom-teatre-2

Lejos de ser considerada un arte para entretener, los políticos lo utilizaban como denuncia social para protestar por algunos males que no podían encarar de forma directa por las represiones de la época. Los inicios del teatro en República Dominicana se remontan al año 1588. En aquel entonces, las puestas escénicas eran pocas y sólo despertaban interés en unos cuantos.

Para 1946 el teatro va tomando otra forma en el país. En ese año se crearon varios grupos independientes y escuelas donde se formaron destacados actores como Franklin Domínguez, Máximo Avilés Blonda y Manuel Rueda. Aunque siempre tuvo seguidores, hasta hace poco el teatro era apoyado por pocos, esto porque se asociaba con aburrimiento y el público tenía la impresión de que al asistir a una sala teatral se encontraría con una pieza de corte social, cuando buscaban entretenimiento.

Esta percepción se fue borrando cuando empezaron a llegar a las salas obras de corte romántico, comedia, teatro musical, dramas y tragedia. Esta variedad sí fue despertando interés en el pueblo y no sólo del público, sino también de un grupo de noveles actores que vieron en las tablas un futuro prometedor.

En el teatro, a nivel latinoamericano, República Dominicana está muy bien colocado en cuanto a evolución. Si nos ponemos a ver el teatro desde los tiempos de la dictadura era un teatro no más de protesta, pero ya para los 70’ y 80’ los maestros viajaron a otros países como Rusia, por ejemplo, de donde viene el método stanislavskino. De ahí nos educaron y nosotros hemos podido sacar nuevas corrientes dominicanas y diferentes, por eso hay tanta variedad teatral”, explicó Josue Guerrero, uno de los actores más destacados de su generación.

_copie-0_ALS_0854 copy

Faltan salas, no obras

Hoy en día, el teatro se ha ganado un público fiel que espera con ansias que se abra el telón para descubrir qué obra los atrapará. El Teatro Nacional Eduardo Brito, Palacio de Bellas Artes, Teatro Guloya, Teatro Las Máscaras, Casa de Teatro, Centro Cultural de España Santo Domingo, Teatro Laura Beltrán, Nader Teatro Bar, Centro Cultural Narciso González son parte de las salas que tiene la capital, Santo Domingo, para exhibir todas las obras que se montan al año.

Pero para muchos teatristas, estas salas no son suficientes para exhibir sus obras ya que en ocasiones deben esperar hasta un año hasta que haya una sala disponible para presentar sus obras. Hay algunos que han optado por fundar su propio teatro para no pasar por la espera. Como la señora Germana Quintana, considerada como una de las leyendas del teatro dominicano. Quintana es la fundadora del Teatro Las Máscaras, este teatro es reconocido por presentar una de las obras más emblemáticas del país, “Cita a Ciegas”, la cual sobrepasa las 100 funciones.

rep-dom-teatre-4

Las obras

Al mes, en el país se exhiben entre 10 y 15 obras. La cultura teatral se ha expandido y esto se confirma cuando se realizan dos y tres funciones extras de una misma obra como es el caso de “Los Prepago”, una pieza donde cuatros actores encarnan a un grupo de amigos que trabajan bailando en un club nudista para ganarse la vida y muestran la otra cara de la historia. La realidad que golpea a estos hombres, sus vicisitudes, sus miedos, sus sueños y sus experiencias.

Escrita por Yovanny Durán, dramaturgo venezolano y adaptado en Santo Domingo por   la actriz Aleja Johnson, la pieza se presentó todo el mes de julio con éxito en   el Bar del Juan Lockward del Teatro Nacional Eduardo Brito.

Lo mismo ha pasado con “Baño de Damas” del también venezolano Rodolfo Santana. Ha tenido tal éxito que ha subido a las tablas a petición del público dos fines de semanas más de lo pautado. La obra narra las vivencias de un grupo de chicas que frecuentan un club nocturno y todo lo que pasa en el baño de damas de esa discoteca. El último fin de semana de julio fue su última función, pero sus productores no descartan una próxima.

Para agosto está prevista la presentación de la obra “7 Mujeres” bajo la dirección del actor Iván Mejía.“7 Mujeres” contará la vida de una familia moderna y sus problemas internos.

La actividad teatral en el país merma un poco a mediado de años y se activa a finales.